De pequeños éramos felices, sin
preocupaciones, seguros de nosotros mismos, autosuficientes en nuestra manera
de ser, ajenos al que dirán o que pensaran si hago esto o lo otro, teníamos
muchisisisima creatividad, imaginación, jugábamos mucho, de hecho la vida era
un juego, nos reíamos mucho, teníamos una gran confianza en el futuro, en que
no nos faltaría nada de nada y confiados en general del amor de los que estaban
cerca de nosotros, éramos todos muy positivos, soñábamos a lo grande, siendo
pequeños, siendo niños éramos grandes...éramos magia...no había imposibles, no había
difíciles, no había malos días, no había tristezas, todo era juego.
Y así fue, esta historia feliz,
esta vida en forma de cuento hasta que entramos en la lavadora de la sociedad,
esa lavadora que da vueltas sin parar, rápido y sin parar, donde hay
establecidas una serie de normas, de reglas, de hábitos, de costumbres por que
un día a alguien se le ocurrió establecerlos y ala¡¡¡, todos por allí....donde
va Vicente donde va la gente....yo estoy un poco en contra de ir por donde va
todo el mundo así sin mas, de hecho cuando percibí esta moda de llevar barbas decidí
afeitarme un rato para descansar, estaba cansado de verme siempre igual y el
ver tanta gente con barba me ayudo a afeitarme, no me gusta sentirme preso de
modas o cosas de esas, tengo que aceptar ciertos convencionalismos, eso esta
claro, no voy a ir por ejemplo desnudo por la calle pero me gusta escapar de
otras cosas si tengo el lujo de poder hacerlo.
En general como estamos tan
inmersos en esta lavadora poca gente se para, se da su tiempo para pensar por
que hago esto y no lo otro, por que voy hacia allá y no hacia allí, por que
vivimos, para que vivimos, que pintamos en esta vida, no hay nada casual y
realmente todo tiene su sentido. En esta sociedad parece como si ya estuviera
todo dado, nos dicen lo que tenemos que hacer y como lo tenemos que hacer y si
uno es feliz en el trabajo es que no trabaja porque en el trabajo hay que estar
serio o de mal humor. A los niños un día también les dijeron lo que estaba bien
y mal (según quien???, por que???), nos cortaron las alas y dejamos en un
momento dado de ser niños, con todo lo malo que trae todo ello, olvidamos un día
que éramos niños.
De pequeño me llamaban
preguntitas, supongo que era un plasta preguntando, bueno he decidido volver a
ser un niño y hacerme preguntas:
Por que los niños están en el
colegio de 9 a
5 de la tarde y encima les mandan deberes para casa (venga chicos ahora tras
tus horas de colegio, de de 6 a
9 ponte a hacer los deberes¡¡¡¡) y mas deberes el fin de semana ???. Es que no
hay tiempo para en todas esas horas de clase (de 9 a 5) hacer los deberes??? Y
cuando juegan??? Y cuando ponen en marcha toda esa creatividad, alegría y
felicidad que tienen y les caracteriza??, estaremos haciendo niños tristes que
de mayores serán adultos tristes con todo lo que ello implica???. Y luego nos
quejamos de que los niños son hiperactivos, si no tienen tiempo para jugar,
como no van a ser hiperactivos???. El sistema educativo esta fatalmente
montado, algunos profesores no son profesores son autómatas, un día dejaron de
ser niños y pasaron a ser robots y se metieron en la lavadora y a darle
vueltas, a hacer cada día lo mismo, a pensar cada día igual, a quedarse en su
zona de confort, a no preguntarse nada y a no crecer, se esta mejor así y ya
esta. Espero que con esto no se me echen encima los profesores (los que conozco
por suerte tienen otros pensamientos), he dicho algunos, porque haberlos hailos.
Como hay algunos oficinistas, banqueros, abogados, economistas, empresarios,
médicos, etc...que viven con el piloto automático en marcha bastantes horas al
día y subidos al carro del estrés.
Los adultos dejamos de ser niños
en el momento en el que nos metimos en la lavadora, a dar vueltas, cada día
igual, cada día lo mismo y con frecuencia de mal humor e irritados, contagiados
por este mundo lleno de estrés y prisas. Si puedes y tienes tiempo levántate un
día entre semana con el siguiente pensamiento “hoy voy a ser feliz, hoy el día
va a ser distinto, va a ser mágico, va a ser el mejor”, si puedes piensa como
si fuera tu ultimo día, ya se que igual no lo es pero piénsalo y si tu corazón,
no tu cabeza, tu corazón, te dice que hay algo que cambiar, cámbialo, puede no
ser fácil pero se puede, todo se puede. Sonríe al que te mira mal o con
indiferencia y te acabara sonriendo, contagia si puedes y quieres el buen rollo
a los demás, si es que te sale el buen rollo por algún sitio, eso esta claro,
porque hay gente que no le sale y no quiere estar de buen rollo y es
respetable, lo malo es que pega a los demás ese mal rollo.
Como digo, vivimos con estrés, no
paramos, un día y otro y otro, con estrés, estamos siempre con prisas hasta para comprar el pan y
el periódico un domingo por la mañana, párate un poco y mira hacia donde vas,
si puedes, si quieres y si no te gusta lo que ves, cámbialo, llévate por tu
intuición, por tu corazón y no por tu cabeza, por tu supuesta lógica que sale
de allí. Busca si quieres y puedes , a lo que te quieres dedicar, lo que te
hace vibrar por dentro, ser tu mismo, ser feliz, vive con pasión la vida como
si fuera tu ultimo día, que un día lo será y reparte alegría, felicidad,
sonrisas y serás alegre, feliz y son riente.
Olvídate del que dirán, ande yo
caliente y ríase la gente y cuanto mas se ria de ti o contigo la gente mejor estarás
haciendo las cosas. Ten confianza en ti, en tu intuición, en lo que sientes, en
ese sexto sentido que de pequeños teníamos tan desarrollado y nos lo
adormilaron y finalmente se feliz, no busques ser feliz, porque lo que se busca
a veces no se encuentra, solo se feliz.
El jueves pasado en mi nueva filosofía
del anti estrés, tocaron series y las empecé a hacer feliz, con una literal
sonrisa, iba feliz, disfrutaba de cómo estaba corriendo hasta que me dio por
hacer un par de ellas rápido y deje de ser feliz y mi cara cambio, ya estaba
estresado, como todos. No veo casi a la gente reír mientras corre, mientras
hace las series, por algo será..., las series no deben ser buenas para la
felicidad y la alegría, es tu hobby pero no ríes, no lo aprovechas a tope, yo
tampoco lo hacia y seguramente en el futuro por momentos tampoco lo haga, así
somos algunos, nos dejamos arrastrar y nos gusta de repente correr estresados,
muy respetable, yo vengo de ahí pero si no sonríes mientras practicas tu hobby
lo estas haciendo mal, es tu elección y la mía eso esta claro pero lo hacemos
mal. Hay que sonreír y ser feliz practicando eso que te apasiona, que en teoría
te hace vibrar y por tanto te hace ser tu mismo, la felicidad esta en esas
pequeñas cosas y detalles, no hay que buscar grandes historias. Luego decidí
correr otra vez tranquilo, sonriente pero ya iba el corazón acelerado, ya se
quedo así y no pude ya disfrutar tanto como al principio, me había cansado y
mate el disfrute que tenía para esa hora de entrenamiento con la escuela. El
entrenador me decía algo serio que le diera caña que eso que hacia era un
calentamiento pero esta vez no toco hacerle caso, su compás no era el mío, aunque
como digo ya no disfrute tanto como al principio y eso que iba con buena
compañía, primero Fernando y luego Javier, pero ya con Javier no fue lo mismo,
iba cansadillo por el calenton que gratuitamente me di al dejar escapar al Rafa
estresado de otras épocas.
En fin...que las series no tienen
ningún sentido hoy en día para mi ( y así será en los próximo tres meses) . En
marzo volveré a recuperarlas con ilusión y volveré a correr con estrés,
buscando tal o cual marca, subir tal o cual cuesta o completar tal o cual
serie, también es cierto que así se disfruta aunque se disfruta en este caso
del resultado final y del proceso hasta ese resultado pero es mas complicado
disfrutar del momento porque hay que correr con estrés si uno quiere ser cada vez
mas rápido y correr con estrés no es precisamente disfrutar, es todo lo
contrario, es sufrir. Me volveré a equivocar cuando vuelva a correr estresado,
pero mientras voy a disfrutar de esta filosofía de correr con conciencia, con
una sonrisa.
Decir todo esto que digo, suena
muy bien y esta claro que cumplir cada día con ello es complicado pero cuantos
más días sumemos con esta filosofía mejores personas seremos y en consecuencia
más felices seremos. Salir de la zona de confort requiere valentía y va muy en
contra de la cabeza, de la mente, que nos ha llevado siempre, que nos ha guiado
siempre por delante del corazón que es el que siempre tiene la razón y al que
no solemos hacer mucho caso, en realidad casi ningún caso, le decimos con
frecuencia, cállate¡¡¡.
Hacer caso al corazón es un gran
acierto, seguir lo que te apasiona, seguir tus convicciones, alejándote del que
dirán, hacer caso a la mente es un gran error pero bueno somos humanos y ahí
esta el tema, sabemos lo que hay que hacer pero no lo hacemos por ser muy
humanos y el día que lo hagamos seremos mas felices. La felicidad simplemente
consiste en guiarnos por el corazón, ahí esta la felicidad y en contemplar cada
día como un día mágico, un día por descubrir, un día único y por supuesto
irrepetible, ahí estará el valor que hay que dar a ese día concreto, que será
irrepetible, no habrá jamás otro día igual a ese.
Y como digo todo esto suena muy
bien y sin embargo esto es así, es la realidad a la que nos empeñamos en dar
muchas veces la espalda. El día que la miremos de frente, de tu a tu,
entenderemos de que va esto de vivir y habremos encontrado, nos habremos
estrellado con la alegría y con eso que llaman felicidad, que existir existe y
que se consigue sumando días felices. Cada día confía, se feliz y serás feliz, confíate
y entrégate a la felicidad como lo hacen los niños, que no se les ve muy
preocupados, la verdad, tan sencillo como eso. Los niños si que saben vivir,
son sumamente listos, seamos como ellos. Juega cada día, invéntate un juego
diario y serás feliz diariamente. VAMOS¡¡¡¡¡¡.
Mañana volveré a disfrutar de las series a mi manera, que
maravilla...
https://www.youtube.com/watch?v=6gxUwXl7ZQ8